De
Doroteo de Sidón se sabe que fue un influyente astrólogo heleno del primer
siglo. Acerca de él puede decirse como reconocimiento que nada de la astrología
árabe habría sido lo misma sin su trabajo, y una gran parte de la astrología
cristiana europea tampoco habría sido lo mismo sin sus cinco libros o
Pentateuco. Los escritos de Doroteo se tuvieron muy en cuenta durante todo el
medievo y las referencias al mismo son más que abundantes.
Por el nombre de Carmen Astrologicum es conocido lo que este astrólogo de la segunda
escuela alejandrina legó a la posteridad, consta de un tratado en cinco
partes dedicado en su totalidad a los juicios natales, a pesar de que en la
mayoría de las veces se nombra a Doroteo como principal defensor de la
astrología horaria.
Lo irónico aparece al ver que el devenir de los años tenía preparada una mala
jugada a la tradición astronómica occidental con el arribo del renacimiento.
Casi contemporáneo de Doroteo fue el mismo Ptolomeo que estudio y trabajó en la
misma escuela, pero el destinó decidió que el más encumbrado de los dos sería
Claudio. Para el siglo XV, cuando Europa adopto la intención de revivir esa
antigua cultura grecorromana casi olvidada, el único trabajo astrológico griego
que se conocía o podía conseguirse era el Tetrabiblos, así que las enseñanzas
de Ptolomeo se mantuvieron como único ejemplo de los métodos helénicos por
mucho tiempo. De esta forma se llegó a la edad moderna y de la vieja astrología
no se conoce sino la punta de iceberg. Gran parte de los usos y costumbres
griegas con respeto al juicio de las estrellas está en desuso debido a este
giro de los acontecimientos.
Hoy día no es muy fácil leer el Carmen Astrologicum en castellano y en Internet
solo se puede saber acerca de su doctrina de las triplicidades, pero por otra
parte, en internet también se puede encontrar una traducción al inglés que el
americano David Pingree realizó en los setentas; a partir de la misma he
comenzado otra traducción de los primeros libros que pienso ir colgando
capítulo por capítulo para el beneficio de los estudiosos del arte.
Hoy
subiré la introducción donde Doroteo se reafirma como gran conocer, habiendo
obtenido su saber de las grandes fuentes de su tiempo. También dejo los dos
primeros capítulos que hablan sobre las principales dignidades de los planetas,
trigonocracia, regencia y exaltación, exactamente en ese orden.
Antes
de terminar quiero decir que deberán disculpar si hay algún error de
traducción, agradecería si alguien me lo hiciese saber. Por último y muy
importante, traducir conlleva un trabajo y un esfuerzo, así que si alguien va
usar este material en algún texto o página web, que mencione este blog y a su
administrador.
***
Primer
libro de Doroteo sobre las estrellas en los juicios concernientes a las
natividades: acerca de la crianza y la condición
En
el nombre de Dios, el piadoso y compasivo, que el Señor sea rico en compasión
hacia ti.
Este
es el primer libro de Doroteo, el egipcio, sobre los juicios concernientes a
las natividades. Él los escogió y los seleccionó y los recogió de los libros
que estuvieron antes que él, y los escribió para su hijo Hermes.
Él
le dijo a su hijo en su testamento: Debo contarte, oh hijo mío, y debo
explicarte, así que puedas depender y estar seguro en tu corazón de lo que voy
a mostrarte, sobre mis trabajos y palabras de acuerdo a las estrellas que
indican para el hombre lo que le concierte desde el momento de su nacimiento
hasta el momento en que abandona el mundo, si Dios lo quiere. He viajado, oh
hijo mío, por muchas ciudades y he visto cosas maravillosas en Egipto y
Babilonia, que está en dirección del Éufrates. He recogido lo mejor de los
dichos de los que estuvieron antes de mí como las abajes recolectan de los
árboles y toda clase de plantas porque en ellas está la miel de la medicina.
Capítulo
1.- El conocimiento de los siete en longitud y latitud, y las triplicidades de
los signos y sus señores
Siempre, hijo mío, antes que cualquier otra cosa, comprende a los siete
en longitud y latitud. Divide los cuatro puntos cardinales por sus grados y
sabe tú con esto las triplicidades de los signos. Las triplicidades: Aries, Leo
y Sagitario son una triplicidad; Tauro, Virgo y Capricornio son una
triplicidad; Géminis, Libra y Acuario son una Triplicidad; y Cáncer, Escorpio y
Piscis son una triplicidad. Sabe tú los señores de las triplicidades: los
señores de la triplicidad de Aries son durante el día el Sol, luego Júpiter,
luego Saturno, durante la noche Júpiter, luego el Sol, luego Saturno; los señores
de la triplicidad de Tauro son durante el día Venus, luego la Luna, luego
Marte, durante la noche la Luna, luego Venus, luego Marte, y Mercurio también
toma parte en Virgo; los señores de la triplicidad de Géminis durante el día
son Saturno, luego Mercurio, luego Júpiter, durante la noche Mercurio, luego
Saturno, luego Júpiter; los señores de la triplicidad de Cáncer son durante el
día Venus, luego Marte, luego la Luna, durante la noche Marte, luego Venus,
luego la Luna. Yo te digo que todo lo que es decidido o indicado es a partir de
los señores de las triplicidades. Para toda aflicción y desastre que alcanza a
la gente del mundo y a la totalidad de los hombres, los señores de las
triplicidades lo ha decidido al momento de un eclipse del Sol o la Luna, en los
cuales éstos indican las cosas que suceden, y por cuanto tiempo serán, y de qué
clase serán. Si el Sol es eclipsado, su eclipse es por dos horas y cada hora es
un año; de la misma forma, para un eclipse de Luna que dura dos horas, cada
hora es un mes. Si el Sol es eclipsado en Aries, yo digo que es desastroso y
las aflicciones están a punto de sobrevenir; si es en Sagitario, yo digo que es
acerca de los caballos y sus labores; si es en Leo, yo digo que es sobre los
Leones; y similar es con cada uno de los signos.
Sé, oh hijo mío, a cada cuál de los siete pertenece cada signo, y comprendo los
signos que se alzan oblicuos* y los signos que se alzan rectos. Conozco las
casas de los planetas: Cáncer es la casa de la Luna, Leo la casa del Sol, Capricornio
y Acuario las casas de Saturno, Sagitario y Piscis las casa de Júpiter, Aries y
Escorpio las de Marte; Tauro y Libra las casas de Venus, y Géminis y Virgo las
de Mercurio. Saturno se regocija llegando a Acuario, Júpiter en Sagitario,
Marte en Escorpio, Venus en Tauro y Mercurio en Virgo.
Capítulo
2.- La exaltación de los planetas
El ascenso del Sol, que es su exaltación, es a diecinueve grados de Aries, el
de la Luna a tres grados de Tauro, el de Saturno a veintiuno grados de Libra,
el de Júpiter a quince grados de Cáncer, el de Marte a veintiocho grados de
Capricornio, el de Venus a veintisiete grados de Piscis, y el de Mercurio a
quince grados de Virgo. El descenso de cada uno de ellos está opuesto a su
ascenso.
*El
original dice crooked, que se traduce literalmente como "torcido".
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